San Valentín: planes en pareja con panes y bollería
Cualquier día es bueno para compartir experiencias con las personas que más queremos, pero si has decidido celebrar el Día de los Enamorados preparando, por ejemplo, una buena cena, tiene que estar a la altura de un buen pan y unos buenos dulces
Regalos para tu enamorada, enamorado, para aquellas personas que han sido fundamentales en tu vida, para aquellas amistades que nunca te han fallado y por supuesto, para uno mismo. Existen muchas formas de celebrar San Valentín, así que, si te gusta festejar el amor en cualquiera de sus formas, toca ir pensando en un plan especial.
Los detalles sabemos que siempre son importantes, y ya que no es necesario hacer grandes regalos, será suficiente con buscar una buena excusa en forma de cena especial. Si todavía no sabes cómo atraer a tus clientes, en este sentido los productos de panadería congelados son el gancho perfecto para tu panadería, horno o cafetería. Puedes ofrecer una interesante oferta de panes para este San Valetín, hechos de forma artesanal y que solo requieren de un sencillo golpe de horno para tenerlos a punto.
Y ya que hablábamos de menús especiales, los panes tienen que estar a la altura. Para acompañar un principal de carne o pescado se puede optar por un clásico que no pasa de moda, como es la hogaza clásica, la hogaza campesina o la hogaza de centeno y lino , este último la opción ideal para los que buscan el equilibrio en la proporción de harinas. Los amantes de los cereales pueden incorporar al menú la hogaza con trigo sarraceno, la hogaza de cereales, la hogaza de pasas, avena y miel, o la hogaza de maíz y semillas, mientras que los que se atreven con todo pueden apostar por el más diferente y singular, la hogaza con aceitunas verdes.
Esto únicamente si hablamos de platos principales, porque si queremos preparar un menú a base de tapas o entrantes, podemos optar por panes tipo el mediterránea cristal, el tiernecito o por ejemplo, el bocatín campesino, ideal para pequeños bocados debido a su miga aireada y su corteza fina y crujiente.
Cualquiera de estas opciones le dará un toque diferente a las preparaciones culinarias que tu clientela busca en un día como este. Ahora bien, ¿cómo cerrar un menú inolvidable? Evidentemente, con un buen dulce.
Aprovechando la ocasión, una opción perfecta debido a su irresistible sabor y aroma puede ser cualquiera de las variedades que nos ofrecen los muffins: ya sea el muffin de chocolate, el muffin pasión red o el muffin choco bomb. Para aquellos que prefieren un toque divertido, pueden elegir entre el mini hoops pink rayado o el hoops cruncky mix, toda una fiesta de chocolate blanco y crujientes perlas de avellana. Y por último y dedicado a los más románticos, ¿cómo iba a faltar en tu expositor la clásica palmera, además con forma de corazón?
Arriesga, pon a prueba tu imaginación y expón en tu mostrador las opciones más divertidas, atractivas y sobre todo amorosas. ¡Ayuda a tu clientela a celebrar un San Valentín inolvidable!
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