Prepara tu local para las buenas temperaturas

Las temperaturas aumentan y es conveniente adaptar tu establecimiento a la nueva estación. Hoy te damos algunos consejos para hacerlo.

Será porque llevamos una buena temporada de lluvias y frío, pero qué ganas de que llegue ya la primavera con sus buenas temperaturas, su sol suave y apetecible, y esas ganas de salir que invaden a todo el mundo. Seguramente a estas alturas ya sabrás que el cambio de estación supone toda una oportunidad para tu negocio. Y es que prepararse para la nueva temporada es imprescindible para triunfar.

En primer lugar, hay recetas especialmente idóneas para esta época del año, cuando la temperatura sube y el calor comienza a apretar. Gracias al pan precocido congelado y las masas congeladas puedes ofrecer alimentos riquísimos y ajustados a estas nuevas necesidades.

Los bocadillos fríos son una gran idea, como el clásico mediterráneo (con tomate en rodajas, queso curado y jamón serrano); el caprese (con tomate fresco o seco, mozzarella fresca, albahaca, aguacate en láminas y pesto); o el nórdico de salmón (con salmón ahumado, queso crema con eneldo, pepino en rodajas y unas gotas de limón). Para ello, puedes utilizar el Super Bocadillo de Agua Express, el Bocadillo Tahona Express o el Bocadillo Riquiño 100% Integral Express. Otros productos, como la Focaccia, también pueden funcionar bien en este contexto. La bollería dulce tiene mucho que decir, así que no descartes utilizar productos como los Croissants rellenos de cremas frías, como yogur o frutos rojos.

Las bebidas refrescantes no solo son una opción: son una necesidad. Desde limonadas hasta smoothies pasando por cafés o infusiones frías, tienes una amplia variedad de opciones a tu alcance para acompañar estos alimentos.

No solo hay que garantizar el bienestar y apetito de los clientes sino asegurarse de que nuestros productos estén en un estado óptimo de conservación en esta nueva estación. Por eso verificar las cámaras frigoríficas resulta fundamental, y supone una ocasión estupenda para reorganizar productos o realizar algún mantenimiento preventivo. También conviene reducir la exposición directa al sol de los productos más delicados y controlar la temperatura en el establecimiento para evitar que las propiedades de los alimentos se vean afectadas.

Otro aspecto que debes tener en cuenta es aclimatar el local. No solo es momento de revisar el aire acondicionado y la ventilación y sacar las sombrillas y los toldos para crear un entorno fresco y agradable, sino que también puedes incluir plantas y elementos naturales para que absorban el calor y ajustar la iluminación para que no aporte más calor del necesario. Escoger sillas ligeras y ventiladas también es una manera de favorecer la comodidad de los comensales.

Y no se puede descuidar al equipo. Ten en cuenta que los uniformes sean transpirables y ligeros y asegúrate de que el personal se tome sus pausas en lugares frescos y se hidrate. Mantener ventilada la zona de la cocina y el almacén para reducir la acumulación de calor es otro punto importante.

Adaptar tu local a la llegada del calor mejorará la experiencia de los clientes y con una buena planificación lo tendrás más fácil que nunca para tener éxito en esta nueva temporada. ¡A por ello!

También te puede interesar