El surtido de mini bollería que encantará a tus clientes
Mini croissant, palmeritas, o mini rejitas. Si algo tienen en común estos productos es que son ideales para incorporar en tu negocio, especialmente ahora que los establecimientos y las terrazas tienen más actividad.
Es un hecho: llega junio y las ganas de salir se multiplican. Las vacaciones y el buen tiempo, además, hacen que muchas personas frecuenten con más asiduidad las terrazas. Y, si ya sabes cómo decorarla para sacarle todo el partido posible, es normal que ahora estés considerando qué ofrecer en tu establecimiento.
Es fácil acertar, en primer lugar, con un surtido de mini bollería dulce. La mini bollería, por su tamaño, resulta perfecta para tomar acompañada de un café o de un refresco. El hecho de que estas piezas no llenen tanto como sus homólogas más grandes tiene como consecuencia que se puedan probar distintas, de forma que se acceda a una mayor variedad.
Pero, ¿cómo disponer de mini bollería dulce que seduzca a nuestros clientes? Fácil: con las masas congeladas. Las masas congeladas permiten que puedas ofrecer en tu panadería, cafetería u horno una diversidad de piezas que de otra forma sería difícil conseguir. Estas masas congeladas se realizan siguiendo todos los procesos artesanales de antaño, conservando un sabor y textura incomparable. La distribución de bollería congelada, no lo dudes, te puede ayudar (y mucho) en este sentido.
Pero veamos ya los productos que podemos ofrecer en nuestro expositor. Comenzamos por los mini croissant, y especialmente el mini croissant de chocolate, al que pocos pueden resistirse. El mini croissant de chocolate, así, es un croissant de aspecto artesanal con un hojaldrado uniforme, muy definido y crujiente, de textura exterior fina e interior suave y esponjoso. El relleno no decepciona: crema de chocolate con suculentas avellanas. A este se suman otros ricos productos en la misma categoría: el mini croissant de mantequilla y el mini croissant de multicereales y mantequilla, tan sabroso como saludable y apetecible.
Los fans acérrimos de los croissant también encontrarán en el croissant artesanito de mantequilla, con una forma de media luna muy atractiva, el clásico que no puede faltar en ningún establecimiento de hostelería y restauración. Y hay poco que se pueda decir del croissant de margarina, un croissant de hojaldre muy crujiente con un laminado de calidad superior que llegará a tus manos ya pintado con huevo y fermentado.
Pero no solo los croissants destacan. Hay otros alimentos que merecen ocupar un lugar propio en tu local. Tres, concretamente. La palmerita de hojaldre crujiente multicereales, en primer lugar, está elaborada con mantequilla y cereales que le aportan un exquisito aroma y sabor. Incorpora en su receta avena, cebada, trigo, centeno y arroz, y está a su vez enriquecida con lino y sésamo, así como decorada con azúcar.
Es el turno de hablar sobre las mini rejitas, por otro lado. La mini rejita de crema de chocolate con avellanas es una pequeña tentación a la que nadie podrá resistirse por la combinación de su masa fina y su abundante y delicioso relleno de crema de chocolate. Su masa está elaborada, además, con un ligero toque de mantequilla, algo que la convierte en un capricho para los sentidos.
Tiene algunos elementos en común con la mini rejita de crema pastelera, cuya masa también aporta un ligero toque de mantequilla. En este caso, además de una masa fina y crujiente, el relleno es de deliciosa crema pastelera, lo que hace que sea un bocado irresistible para los que prefieren este sabor.
Ya sabes: ahora tienes que elegir el surtido de mini bollería que mejor encaje en panadería, cafetería u horno, y dejar que tus clientes disfruten con tus productos.
Además no olvides que, de vez en cuando, incluir una pequeña pieza de bollería junto con el café o refresco consigue fidelizar a tu clientela y es un detalle que el consumidor siempre agradece.
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