El arte de la repostería
El Día Mundial de la Repostería se celebra el tercer domingo de mayo. Toda una oportunidad para conocer más de cerca algunos productos dulces que necesitas incorporar ya a tu negocio.
El tercer domingo de mayo tiene lugar una fecha muy especial: el Día Mundial de la Repostería. Y es que, no lo olvidemos, la repostería no solo se basa en hornear croissants, preparar deliciosas magdalenas o decorar con cariño y mimo piezas de hojaldre. La repostería va más allá de todo ello y se considera un auténtico arte por el equilibrio entre ingredientes y la técnica que hay que emplear para llevarlos a todos a su máximo potencial.
Gracias a las masas congeladas, mediante las cuales pueden conseguir productos riquísimos de forma fácil, sencilla y rentable, ya sabes que no tienes por qué no contar con este tipo de alimentos en tu negocio. Croissants congelados, perfectos tras un golpe de horno; napolitanas de crema… el listado es prácticamente interminable, y ahora una nueva novedad se suma al catálogo: el Pastel de Nata.
El pastel de nata, de origen portugués, comenzó a comercializarse en el lejano 1837, y procede de una receta secreta del convento del Monasterio de los Jerónimos. Fue uno de los monjes el que empezó a preparar estos deliciosos pastelitos que ahora gozan de fama internacional. Elaborado con una base de hojaldre aireado y crujiente que forma una tartaleta rellena con crema, el Pastel de Nata cuenta lleva margarina, crema con huevo y leche, y un toque de limón y canela sutil pero muy característico de este bocado tan suculento.
Se hornea, además, en un molde; algo que ayuda a recoger el producto e incluso ofrecerlo para su venta, ya que resulta cómodo y práctico de comer. Se puede ofrecer como postre de un menú, o como una rica merienda que degustar junto a una bebida o un café, por lo que las posibilidades que presenta son muchas y variadas.
En este Día Mundial de la Repostería no es el único protagonista, eso sí. Las planchas y las tartas son otras estupendas opciones para disfrutar de este día y sacar el máximo partido al irresistible dulce. La Plancha de Selva Negra, un producto de pastelería congelado con capas de bizcocho de trufa y virutas de chocolate; la Plancha de Tiramisú, con sabor tiramisú y cacao en polvo en su superficie; la Plancha de San Marcos, con su característica crema con yema de huevo; y la Plancha de Queso y Arándanos, con capas de mousse con queso fresco y decorado con crema con arándanos son algunos de los productos que también puedes incluir en tu establecimiento.
Eso por no hablar de las irresistibles tartas, como la Tarta de Queso, con una textura suave y cremosa; la Tarta Red Velvet, una tentación suave y sedosa con un llamativo color rojo oscuro; la Tarta Carrot, con zanahoria y queso blanco; la Tarta Doble Bombón, elaborada con bizcocho de chocolate con relleno de crema de chocolate; y la Tarta de Almendras, con almendras molidas, ralladura de limón y un toque de canela. Tampoco puedes pasar por alto el clásico el Brownie, hecho con bizcocho y una rica crema de chocolate, y decorado con trocitos de nueces y con aros de chocolate.
¡A disfrutar de este (dulce) Día Mundial de la Repostería!
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