El pan: un alimento primordial durante la infancia
La alimentación de los niños es clave para que estos crezcan de forma saludable a todos los niveles, tanto físicos como intelectuales. Entre los productos que no deben faltar en la dieta de los más pequeños el pan ocupa un lugar central.
El 20 de noviembre se celebra el Día Universal del Niño. Una fecha que sirve, entre otras cosas, para dar a conocer los derechos de la infancia y concienciar a la gente de la importancia de trabajar día a día por su bienestar y desarrollo. Unicef , la agencia de las Naciones Unidas enfocada a la infancia, recuerda, con motivo de esta conmemoración, que todos los niños tienen derecho a la educación, a la protección y, por supuesto, a la salud.
Una buena salud pasa por una alimentación óptima. Y es que, durante los primeros años de vida, una alimentación correcta puede repercutir de forma positiva, no solo en el estado físico de los niños, sino también en su habilidad para aprender o comunicarse con el resto de personas. En este sentido, una dieta saludable incluye no abusar de grasas vegetales, comer al menos cinco veces al día frutas y verduras y consumir hidratos de carbono. Los hidratos de carbono resultan muy importantes, puesto que proporcionan energía, son fuente de fibra, contribuyen a tener una buena salud intestinal y constituyen el nutriente principal del cerebro, entre otras ventajas.
Precisamente, el pan aporta una gran cantidad de nutrientes a los niños en forma de hidratos de carbono. No solo eso: el pan tiene un alto contenido en fibra y ácido fólico, así como vitamina B1, yodo y zinc.
En una primera etapa en el desarrollo de los niños el pan blanco es ideal por lo suave de su corteza, aunque también encontramos a quien le gustan otras variedades.
Tener una amplia gama de panes en tu establecimiento, es muy fácil gracias a los productos de panadería congelados como el pan precocido. El pan precocido congelado es una apuesta segura para contar en tu negocio con pan blanco, ideal para los niños, de forma rentable, sencilla y cómoda. Y, en este sentido, hay algunos productos estrella que suelen convertirse en el antojo de los más pequeños. Te contamos cuáles son.
Pan con leche, el preferido y más adecuado para los niños
Una de las opciones predilectas para los niños es el pan con leche. Este pan está compuesto por una corteza blanda, suave y miga esponjosa, muy fácil de comer, motivo por el cual es ideal tanto para los más pequeños como para los mayores. Prepararlo en tu establecimiento, además, no tiene ningún misterio: gracias a su proceso express bastan unos pocos minutos de horneado para que esté listo para servir.
Otra opción es el panecillo. También es un pan blanco de corteza muy fina y sabor suave. Su tamaño, además, es el ideal para preparar bocatines, que pueden hacer las delicias de los niños durante las meriendas. Se puede combinar con multitud de ingredientes: embutido o fiambre, queso, etc. Su versatilidad hace que siempre sea una propuesta excelente.
Para los niños que van creciendo, otra deliciosa alternativa para la hora del recreo o la merienda es el bocadillo de agua. Tiene un alveolado excelente, crujiente y duradero que siempre triunfa. Por otro lado, no puedes dejar de ofrecer productos ya rebanados, que también llegados a cierto punto pueden convertirse en los más versátiles permitiendo multitud de mezclas. En este sentido, tienes opciones como la rebanada de pan payés o el pan de molde clásico, un pan muy suave y tierno y fácil de comer cuyas características lo han convertido en la mejor alternativa cuando se dispone de poco tiempo.
Por último no nos olvidamos de los panes de hamburguesa y de los panes especiales para hotdog que tanto les gustan y que en algunas ocasiones serán para ti un producto tan sencillo de ofrecer como descongelar durante unos minutos.
Con ellos nuestros clientes pueden elaborar una deliciosa comida o cena familiar o con amigos, generando momentos de risas, diversión, y así estrechar lazos con los más pequeños, algo que no hay que descuidar ya que es tan importante como velar por una alimentación saludable.
La alimentación de los niños es clave y seguro que una de las principales preocupaciones de los padres y madres que visitan tu establecimiento. Por eso, no dudes en ofrecer productos que estén sabrosos y, además, ayuden a crecer a los más pequeños. Así, todo el mundo sale ganando.