Productos sanos y riquísimos para celebrar el Día Mundial de la Salud
Nadie sabe a ciencia cierta si de la pandemia hemos salido mejores, pero de lo que no cabe duda es que hemos salido más concienciados por nuestra salud. La alta demanda de productos sin gluten y productos veganos lo demuestra.
Cada 7 de abril desde hace más de 70 años se conmemora el Día Mundial de la Salud, una fecha que sirve para advertir en cada ocasión sobre un tema concreto relacionado con la salud. Este año el foco se coloca, especialmente, sobre nuestro planeta, pero también (y como no podría ser de otra forma) sobre la necesidad de abrazar una alimentación más saludable. Y no es precisamente algo baladí, porque en los últimos años la preocupación en torno al comer (y al comer bien) se ha ido incrementando.
Las cifras hablan por sí solas. España, por ejemplo, es uno de los países que ha manifestado un mayor interés por una alimentación saludable tras la pandemia del coronavirus. Y es que la población española, por ejemplo, asocia tener una buena alimentación con estar más protegidos frente a las enfermedades. Otros estudios avalan que cada vez más consumidores españoles se preocupan por comer sano, lo que se traduce, a su vez, en tratar de incorporar a la dieta alimentos con mejores cualidades para su salud. El consumidor cada vez está más informado, y hay que ofrecerle un beneficio extra para contribuir a estos propósitos que, sin duda, establecimientos de hostelería, cafeterías, panaderías y hornos también quieren alcanzar.
Por ese mismo motivo, ante estas circunstancias los proveedores de pan y bollería no tienen excusa: deben de ser capaces de innovar en recetas y procesos para conseguir los mejores productos, hechos con los mejores ingredientes, y ofrecer así la mejor calidad posible a sus clientes. Un reto que incluye a partir de este momento introducir productos sin gluten y productos veganos que puedan alinearse con los objetivos ya expuestos. El pan sin gluten es una realidad desde hace ya mucho tiempo, pero también hay otros interesantes productos para panadería congelados que demuestran que hay posibilidades para todo el mundo.
Entre la bollería sin gluten, por ejemplo, destacan fundamentalmente dos productos: el mini croissant sin gluten y la mini napolitana de crema de chocolate sin gluten. El primero, indispensable en el surtido de productos para celíacos y para quienes deseen eliminar o reducir el consumo de gluten en su dieta, no podría ser más fácil de ofrecer en tu establecimiento. Con un alto contenido en fibra, y una esponjosa textura, viene ya horneado, listo para consumir tras su descongelación.
Por lo que respecta a la mini napolitana de crema de chocolate sin gluten es el perfecto ejemplo de que lo rico no está reñido con lo sano. Elaborada con ingredientes naturales, margarina y masa madre de maíz, y sin huevo, es un producto 100% horneado que solo necesita descongelarse para estar perfecto.
El pan sin gluten tiene una holgada representación con los siguientes alimentos. La baguettina sin gluten, apta para celíacos, está lista después de descongelarse durante unos 15 minutos aproximadamente, lo que la convierte en una opción muy rápida y suculenta ideal para acompañar comidas y cenas. Los amantes de las hamburguesas también están de enhorabuena, ya que el pan de hamburguesa sin gluten ha llegado para quedarse de forma indiscutible. De nuevo es un producto que apenas necesita tiempo para prepararse; bastará solo con unos minutos para que se descongele.
El panecillo de hostelería sin gluten, por otro lado, resulta el formato ideal para acompañar los menús o preparar montaditos. Este pan precocido congelado tiene un acabado express, algo que lo hace especialmente idóneo para hostelería ya que permite su preparación con tan solo 7 minutos de cocción.
Y, por si todo esto fuera poco, los productos veganos han aterrizado también con mucha fuerza: croissant artesano de margarina, caracola de chocolate, napolitana de chocolate, caña de chocolate, herradura de cabello, crujiente de manzana… Porque, si hay algo claro en esta época, es que ofertar productos sin gluten y veganos es cada vez más una necesidad y un compromiso con los clientes.