ELABORACIÓN. Elaborado con largos tiempos de reposo y fermentación que dan como resultado un pan rústico crujiente y aireado con gran durabilidad.
CORTEZA. Corteza rústica, fina y crujiente, con superficie ligeramente enharinada y greña viva. Destaca, además, su intenso tono tostado que le confiere un atractivo aspecto tradicional.
MIGA. Destaca por su estructura irregular alveolada y mordida fresca que otorgan ligereza y esponjosidad al bocado.
MOMENTOS DE CONSUMO. Este formato ligeramente más estrecho y alargado es ideal para aquellos que prefieren un pan con menos miga, más crujiente y ligero.
La calidad de las materias primas y el proceso artesanal permiten una alta hidratación de los productos, lo que se traduce en una mayor durabilidad.
Panes elaborados con tiempos muy largos de reposo y fermentación, que favorecen la liberación de los aromas, texturas y sabores propios de un gran pan.
