Mantequilla que sigue los estándares de la más alta bollería con un toque muy de nuestra tierra: una miga de color amarillo intenso muy característica.
Se elabora de forma tradicional, a partir de crema de leche fresca batida durante horas. Proviene de vacas alimentadas en invierno con pasto natural. Su tonalidad color crema y su aroma a leche de invierno se imprimirá en cada croissant.